Me falla una pierna al andar

Debilidad repentina en las piernas incapaz de caminar

El término astasia es intercambiable con el de astasis y es el más comúnmente referido en la literatura que lo describe. La astasia es la incapacidad de ponerse de pie o sentarse sin ayuda en ausencia de debilidad motora o pérdida sensorial (aunque la inclusión de «la falta de debilidad motora» ha sido debatida por algunos médicos). Se clasifica más como un síntoma que como una enfermedad real, ya que describe una alteración de la coordinación muscular que provoca este déficit. La alteración difiere de la ataxia cerebelosa en que con la astasis la marcha puede ser relativamente normal, con el equilibrio significativamente deteriorado durante la transición de una posición sentada a otra de pie. Esta alteración del equilibrio es similar a la de los pacientes con síndrome vestibulocerebeloso, que es una enfermedad neurológica progresiva con muchos síntomas y efectos.
La astasia se ha observado en pacientes con diversas lesiones talámicas, que afectan predominantemente a la región lateral posterior del cerebro[1] y se acompaña con mayor frecuencia de abasia, aunque no siempre. La abasia es un síntoma muy similar y es la incapacidad para caminar. Los dos se observan con mayor frecuencia en la astasia-abasia, que también se denomina enfermedad de Blocq. Es más frecuente ver la astasia y la abasia juntas que ver una u otra[2].

Dolor de piernas después de caminar demasiado

¿Conoces esa sensación cuando te levantas de la cama y no sientes la pierna? ¿O cuando te golpeas el lateral de la pierna contra una mesa y te encuentras con que te desplomas en el suelo? Eso es la pierna muerta en su forma más leve. La palabra «pierna muerta» es una frase que utilizamos a menudo, pero ¿te has parado a pensar en lo que realmente significa?
La pierna muerta, también conocida como contusión del cuádriceps o muslo acorchado, se produce cuando los músculos del muslo reciben un impacto directo. Se trata de una lesión deportiva muy común, ya que el impacto hace que los músculos del muslo (cuádriceps) se aplasten contra el hueso subyacente del muslo (fémur). Como resultado, puede producirse una hemorragia tanto dentro como alrededor del músculo y del muslo. Esto puede provocar hematomas generalizados, dolor y restricción de movimientos.
Muy a menudo, estas lesiones pueden tratarse de forma conservadora con mínimas complicaciones. Sin embargo, en casos graves y cuando se tratan de forma inadecuada, puede producirse una miositis osificante. Este término se refiere a la formación de tejido óseo dentro del músculo.
Puede ser difícil protegerse de los impactos directos, sobre todo cuando se practican deportes como el hockey, el fútbol o el rugby. Sin embargo, hay algunas medidas que puedes tomar para reducir las posibilidades de sufrir una lesión.

¿pueden los problemas cardíacos causar debilidad en las piernas?

Aubrey Bailey es doctora en fisioterapia con un título adicional en psicología y certificación de la junta en terapia de la mano. La Dra. Bailey también es profesora de Anatomía y Fisiología. Fue entrenadora personal certificada por el American College of Sports Medicine y actualmente trabaja como entrenadora de nivel 1 de CrossFit.
Laura Niedziocha comenzó su carrera de escritora en 2007. Ha contribuido con material para el Centro de Terapia Física y Bienestar Stoneking en Lambertville, Nueva Jersey, y su trabajo ha aparecido en varias publicaciones en línea. Niedziocha se licenció en Ciencias del Ejercicio en la Universidad de Temple. También es licenciada en comunicación por el Community College de Filadelfia.
La imposibilidad de caminar tan lejos y durante tanto tiempo como le gustaría puede ser frustrante e incluso deprimente. Si no está acostumbrado a realizar mucha actividad física, podría ser una respuesta normal al aumento del ejercicio.
Sin embargo, también podría ser una señal que su cuerpo le está dando para alertarle de un problema de salud. Dos causas médicas de la debilidad en las piernas al caminar una distancia corta pueden ser la estenosis espinal o la enfermedad arterial periférica, especialmente a medida que se envejece.

Debilidad en las piernas al caminar

Los pacientes con debilidad funcional experimentan síntomas de debilidad en las extremidades que pueden ser incapacitantes y aterradores, como problemas para caminar o una «pesadez» en un lado, caída de objetos o la sensación de que una extremidad no se siente normal o «parte de ellos».
Para el paciente y el médico, a menudo parece que se ha sufrido un derrame cerebral o que se tienen síntomas de esclerosis múltiple. Sin embargo, a diferencia de estas enfermedades, en la debilidad funcional de las extremidades no hay daños permanentes en el sistema nervioso, lo que significa que puede mejorar o incluso desaparecer por completo.
Cuando se les examina, el médico suele encontrar un patrón de debilidad típico de estos problemas y no encuentra cambios en los reflejos u otros indicios de una enfermedad neurológica estructural (como el ictus).
Esto se debe a que en la debilidad funcional todas las partes del sistema nervioso están ahí, sólo que no están funcionando correctamente, de modo que cuando intentas mover el brazo o la pierna no lo hace tan bien como debería.
Su médico puede encontrar signos físicos específicos de debilidad funcional cuando le examine y hacer el diagnóstico de la misma manera que lo haría con una enfermedad como la migraña (que tampoco tiene una «prueba»).